Cerca de un centenar de familias de Las Rozas reciben ayudas municipales para alquiler y dependencia

El Ayuntamiento de Las Rozas, a través de la Concejalía de Servicios Sociales, ha concedido a lo largo de este año ayudas municipales por valor de 100.000 euros a cerca de un centenar de familias del municipio, para ayudarlas a hacer frente al pago del alquiler o hipoteca de su vivienda habitual y facilitar la atención de personas en situación de dependencia a su cargo

El Ayuntamiento de Las Rozas, a través de la Concejalía de Servicios Sociales, ha concedido a lo largo de este año ayudas municipales por valor de 100.000 euros a cerca de un centenar de familias del municipio, para ayudarlas a hacer frente al pago del alquiler o hipoteca de su vivienda habitual y facilitar la atención de personas en situación de dependencia a su cargo.

La primera de estas ayudas, cuyo objetivo es evitar exponer a la unidad familiar cuyos miembros están desempleados a una posible situación de vulnerabilidad y riesgo social, ha beneficiado a 30 familias que han recibido hasta 1.800 euros por vivienda. Por su parte, más de medio centenar de familias de Las Rozas han podido disfrutar de una ayuda de hasta 700 euros por persona en situación de dependencia, una cantidad destinada a favorecer la permanencia de estas personas en su entorno familiar y social y a cubrir parte de los gastos que soportan las familias cuidadoras.

Ambas subvenciones forman parte de la convocatoria 2012 de ayudas de emergencia social, dirigidas principalmente a los vecinos que se encuentran en circunstancias de especial vulnerabilidad, personas en situación de dependencia o sus familiares, mayores, personas con limitación en la actividad y desempleados.

Aparte de las mencionadas, el Ayuntamiento también destina fondos en ayudas para financiar la adecuación de las viviendas de los mayores de 65 años, personas discapacitadas o con limitación en la actividad o subvencionar la estancia en una residencia de personas mayores durante las vacaciones de verano para dar un respiro a las familias cuidadoras, además de las ayudas económicas de ocio estival para personas con discapacidad intelectual.