El IES Carmen Conde preocupado por el peso de las mochilas

El consejo Escolar del IES Carmen Conde en el municipio de Las Rozas, a propuesta de los representantes de las familias del alumnado, ha aprobado como prueba piloto el proceder a dividir los libros por trimestres en algunas asignaturas, con el fin de reducir el peso que los alumnos tiene que transportar diariamente. Con esta sencilla operación, consistente en dividir los libros en tres tomos, se reduce el peso de la mochila en cerca de dos tercios, pues los alumnos solo llevan el fascículo de cada asignatura que va a utilizar ese día.

El consejo Escolar del IES Carmen Conde en el municipio de Las Rozas, a propuesta de los representantes de las familias del alumnado, ha aprobado como prueba piloto el proceder a dividir los libros por trimestres en algunas asignaturas, con el fin de reducir el peso que los alumnos tiene que transportar diariamente. Con esta sencilla operación, consistente en dividir los libros en tres tomos, se reduce el peso de la mochila en cerca de dos tercios, pues los alumnos solo llevan el fascículo de cada asignatura que va a utilizar ese día.

Esta iniciativa se encuadra en el proyecto “Quítate un peso de encima” llevado a cabo por la Asociación de Padres del Centro y que pretende adecuar el peso de las mochilas a las recomendaciones de los profesionales de la medicina que indican que no deben superar el 10% del peso del chico o chica que la transporta.

Jesús Barrio, director del centro, indica que “los docentes han sido receptivos a las propuestas de las familias pues consideran que, con pequeños cambios en la organización de las clases, se puede reducir considerablemente el peso que los alumnos transportan cada día, mejorando así la salud de su espalda”.

Alberto Barrera, representante de familias del alumnado, señala que “desde hace tiempo estamos estudiando la forma de reducir el peso de las mochilas de nuestros hijos y las propuestas que hemos hecho han sido bien acogidas por el claustro de profesores del centro, primero sugiriendo el uso de archivadores y hojas sueltas en vez de un cuaderno por asignatura y ahora la de partir los libros por trimestres”.

Todos los componentes de la comunidad educativa del centro se unen a la demanda de otros centros de solicitar a las editoriales que editen los libros ya divididos, con lo que el coste añadido de la división sería menor.